Estela Plateada de Slott y Allred

El que fuera el heraldo de Galactus, Estela Plateada, ha tenido desde su conversión a héroe un sinfín de amigos y acompañantes de viaje por el basto universo. Por otra parte, Dawn Greenwood de la Tierra, nunca ha salido de Anchor Bay, Nueva Inglaterra. Contra todo pronostico estos dos seres tan opuestos están destinados a hacer equipo y, quién sabe, quizás Dawn le muestre a Norrin Radd (Estela Plateada) algunos aspectos del universo que desconocía.

Esta trama tan aparentemente mundana es la que nos proponía Dan Slott, quien ya demostró en su etapa en Hulka, así como la más reciente en Spider-Man, que tiene una soberbia habilidad de mezclar de manera homogénea lo fantástico con lo terrenal. ¿Pues, qué hay más humano que el amor? Y es ese amor lo que impera en este cómic. El de Estela Plateada y Dawn, pero también por los autores al género en el que se encuentran y también a la cultura pop en general.

Ahí tenemos referencias a algunas de las obras de Hayao Miyazaki, a la revista 2000AD, también al semanal Red Dwarf, sin olvidar como no, al legado de Stan Lee y Jack Kirby al medio. De hecho el dibujo evoca recuerdos a este último. Pues el matrimonio Allred, con Mike al dibujo y Laura al color, hacen una labor encomiable. Una verdadera demostración de Pop Art cuyas páginas son para enmarcar y exponer. Todo ello sin abandonar ese tono desenfadado que también impera en la serie.

El título Estela Plateada de Slott y Allred (y que Panini recoge en un solo Omnibus) puede llevar a equivoco. Pues, aunque no haya ninguno de los 30 números que se hayan saltado estos autores, Silver Surfer no es el protagonista. Y es que considero que aunque sea el principal personaje, este deja paso a Dawn Greenwood e incluso a Amí, la tabla de Norrin Radd. Con todo ello se construye una historia inolvidable cuyo emotivo y perfecto final consiguió que soltara una lagrimilla.

Guion: 9
Dibujo: 9
Nota Cómics y Birras: 9